Cobijos

Las viejas lunas
no esperan nada
únicamente
la noche de noviembre
trémula y oscura

Me asomo al borde
de todos los precipicios
y miro en la profundidad
allí dónde renacen estos monstruos
y aquellos presentimientos

Pero no estás tú
ni siquiera tu nombre

Sólo un reflejo de luna
ancestral
impasible

Comentarios

  1. Después de tu poema la luna de Noviembre me sigue pareciento hermosa en su impasibilidad. Me quedé esperando la chispa de esperanza al fin del último verso.
    Las viejas lunas lo merecen.
    Buen trabajo. :P

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  2. Gracias Mamen...¡que obediente eres! un beso.

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