Gritos en la almohada
Ya te dije que es inútil hablarle a la almohada
¿por qué le gritas?
La noche está cargada de ruidos
de mosquitos que zumban sobre mi cabeza
de coches que cruzan la calle con su música
estridente y su claxon incontrolado
Ya te dije que hablas en sueños
pero que no entiendo lo que dices
que me golpeas enojada
sin que haya culpa para ello
Bueno
que sueñas y te mueves
inquieta
gritas a la almohada
me abrazas
y a veces lloras sin lágrimas
Se que mañana no recordarás
haber gritado
ni el llanto seco de tus sueños
Algún vecino pensará que te he matado
llamará a la policía y habrá que aclarar el malentendido
o tal vez no sea así
me despertaré y no estarás
como ayer
que pasé toda la noche buscándote
gritando a la almohada
empapada de sudor y lágrimas invisibles.
¿por qué le gritas?
La noche está cargada de ruidos
de mosquitos que zumban sobre mi cabeza
de coches que cruzan la calle con su música
estridente y su claxon incontrolado
Ya te dije que hablas en sueños
pero que no entiendo lo que dices
que me golpeas enojada
sin que haya culpa para ello
Bueno
que sueñas y te mueves
inquieta
gritas a la almohada
me abrazas
y a veces lloras sin lágrimas
Se que mañana no recordarás
haber gritado
ni el llanto seco de tus sueños
Algún vecino pensará que te he matado
llamará a la policía y habrá que aclarar el malentendido
o tal vez no sea así
me despertaré y no estarás
como ayer
que pasé toda la noche buscándote
gritando a la almohada
empapada de sudor y lágrimas invisibles.
Un gran poema desasosegante y turbador en estas cálidas noches del verano. Un saludo, amigo
ResponderEliminarContundentem, lleno de sugerencias. Muy bueno, Jose Manuel.
ResponderEliminarGracias a los dos, me alegra haber transmitido la turbación y sugerir, ¡¡es tan difícil!!. Un abrazo amigos.
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