La joven del acordeón

Hace ya más de un año que publiqué aquí un poema titulado "la joven y el acordeón". Ahora os paso una nueva versión para que me digáis cual os gusta más... si os apetece.


La joven tocaba el acordeón
¿O era el acordeón quién robaba de la joven
el tacto quebrado de sus manos?
La joven tocaba el acordeón
sobre la calle colonizada de sombras
frente al escaparate de todas las miradas
y la presencia sutil de los niños y los gatos
El acordeón palpaba la sombra de la joven
danzaba junto a ella
con ese continuo taconeo de teclas y suspiros
Y mirábamos la canción que emergía
de sus dedos claustrofóbicos
del fuelle estirado y lírico
del sonoro relucir del silencio
de las pausas quebradas por las voces
de una calle diseccionada
por una joven y su acordeón
Más arriba Pessoa y la palabra
el verbo y la metáfora


Atrás una canción portuguesa
regresaba al corazón de una joven
que tocaba el acordeón
como si el acordeón le tocara el alma
Era Lisboa
otoño
dos mil diez.

Comentarios

  1. Pues he estado comparando las dos versiones de tu obra (que ya me llamó la atención en un primer contacto con tu blog) y solo puedo decirte que ambas me parecen muy buenas. En esta última, cambias quizá el enfoque centrándote más en la persona y eso le da una fuerza particular. No soy quien para juzgar si una es mejor que otra pero te diré que he pasado un rato agradable comparando y aprendiendo. Un abrazo y ¡Hasta pasado mañana!

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  2. Muchas gracias Armando por tu comentario, y por tus visitas. Nos vemos en Segovia...

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